Tengo un super tip para aquellas personas que suelen pedir sus doce deseos acompañados de uvas y campanadas: concéntrense en ellos desde temprano, no se esperen hasta el último minuto.
Así, el Universo tendrá más tiempo para asimilarlos y la probabilidad de que se cumplan aumentará considerablemente. Por qué lo digo tan convencida? Porque hace un año, teniendo toda una tarde en la que no podíamos hacer nada más que apartar el lugar desde el cual veríamos los fuegos artificiales en Sydney, a Luisa y a mí lo que más nos sobraba era tiempo. Así que después de un par de juegos y sandwiches, estuvimos enlistando por varias horas las cosas que queríamos para este año y, afortunadamente, todas se cumplieron. De eso nos dimos cuenta hace poco, cuando ella encontró la lista y entonces checamos punto por punto:
~ Salud. Aunque llevo un mes con una tos que ni parece tos, estoy íntegra, no me operaron y no padecí ninguna enfermedad grave.
~ Wey. Aquí, la vida me aplicó lo de "La pata de mono" porque, por no pedir bien, me mandó eso, un wey.
~ Viajar más o igual que el año pasado. Definitivamente cumplido. Hasta acabé viviendo un mes en Cancún!
~ Trabajo chingón. Poder estar con delfines todos los días les dice algo?
~ Felicidad de mis papás. Mi papá cantó en el radio y actualmente toma clases de música, cosa que quería hacer desde hace tiempo.
Mi mama toma clases de inglés y sigue viajando mucho.
~ Estabilidad de Mar. Ella regresó. Sólo espero que sus proyectos echen a andar pronto.
~ Crecer. Lea algunas entradas de los primeros meses y dese cuenta usted mismo.
~ Bajar de peso. Porque nunca está de más y porque es preferible no pelearte con tu ropa.
~ Buenas noticias. Sí que las tuve! Desde un peso encontrado hasta Radiohead en México, este año estuvo lleno de buenas noticias.
~ Mucha simpleza. Afortunadamente, le sigo encontrando el lado risible a las cosas. Ay Dios mío, ayúdame!
~ Que no me costara trabajo regresar a México. Éste valía por dos porque sabía el reto que eso representaba y aunque fue muy difícil, no morí en el intento.
Hasta ahorita ya tengo claras un par de cosas para mi nueva lista. Las demás, tendré tiempo de meditarlas rumbo a Catemaco, donde empezaremos el año rodeados de esa energía que sólo la Naturaleza sabe dar. Y así, entre manantial, selva y laguna, espero que una vez más el Universo reciba mi gratitud por todo lo vivido, me escuche y lo ponga todo en el lugar indicado.
29.12.08
27.12.08
Enlistando
Acabo de darme cuenta que nunca he explicado del todo la etiqueta de "101 things to do before you die". La mayoría de la gente que me conoce sabe que tengo un libro de título homónimo y de ahí probablemente sobrentiendan que cada que marco un post con esa etiqueta es porque lo que hice está en la lista. Pero para aquel amable y querido lector que no sepa de lo que le estoy hablando, en estas líneas le dejaré claro el asunto.
Hace un año, en Australia, unos días antes de Navidad recorrimos la ciudad en busca de nuestros regalos. Por The Rocks había una librería muy bonita y decidimos entrar. A pesar de que yo ya había estado ahí antes, muchos de los libros en exhibición no los conocía y entonces estuvimos hojeándolos por mucho tiempo. No fue hasta el momento en que ya estábamos a punto de irnos que Fer me enseñó el libro. No recuerdo cuál cosa por hacer vi primero, pero lo que sí recuerdo es que lo quise como mi propio regalo de Navidad. Con la envoltura más linda que he visto, abajo de nuestro arbolito de Navidad improvisado, me esperaba una lista de cosas que siempre había querido hacer pero que ahora estaba estructurada en un hermoso libro, lleno de colores, dibujos y creatividad.
Hoy, un año después, tomaré como base esa lista y dejaré un pequeño recuento de las cosas que he hecho, de las cosas que no me interesa cumplir y de las que, por el contrario, quiero realizar lo más pronto posible.
Things I've done
2. Swim with sharks, whales, dolphins & tropical fish.
6. Throw a house party when your parents are out.
17. Own a pointless collection.
28. Sky dive.
29. Meet your idol.
33. Get to score a hole-in-one.
44. Attend a film premiere.
46. Scuba dive.
51. Learn another language.
75. Get a tattoo and/or a piercing.
80. Spend Christmas on the beach.
86. Run a marathon.
Things I won't do (and why I won't do them)
7. Be part of a threesome. Y dejar que alguien más lo bese y le haga cositas frente a mí? Ja! Qué risa!
19. Master Poker and win big in a casino. Los casinos se me hacen una gran mentira y algo totalmente innecesario. Apostemos jugando Adigma o algo más entretenido.
24. See a space shuttle launch. Sí, muy interesante, pero creo que invertiría mejor esas horas estando con Santiago.
30. Stay in the best suite in a five star hotel. Tan divertidos que son los hostales!
53. Complete a coast to coast road trip across America. Antes México, Sudamérica, Europa, Australia, Asia, África, Canadá...
95. Get revenge. Opino justamente lo contrario, que perdonar debería de ocupar este número en la lista.
Things I really want to do
9. Learn that instrument.
10. Leave your mark in graffiti.
26. Bungee jump.
31. Experience weightlessness.
32. See the aurora borealis.
36. Visit every country/continent.
43. Throw a dart into a map and travel to where it lands.
58. Live in the place you love.
72. Have enough money to do all the things on this list.
96. Be an extra in a film.
101. Continue your gene pool.
Hace un año, en Australia, unos días antes de Navidad recorrimos la ciudad en busca de nuestros regalos. Por The Rocks había una librería muy bonita y decidimos entrar. A pesar de que yo ya había estado ahí antes, muchos de los libros en exhibición no los conocía y entonces estuvimos hojeándolos por mucho tiempo. No fue hasta el momento en que ya estábamos a punto de irnos que Fer me enseñó el libro. No recuerdo cuál cosa por hacer vi primero, pero lo que sí recuerdo es que lo quise como mi propio regalo de Navidad. Con la envoltura más linda que he visto, abajo de nuestro arbolito de Navidad improvisado, me esperaba una lista de cosas que siempre había querido hacer pero que ahora estaba estructurada en un hermoso libro, lleno de colores, dibujos y creatividad.
Hoy, un año después, tomaré como base esa lista y dejaré un pequeño recuento de las cosas que he hecho, de las cosas que no me interesa cumplir y de las que, por el contrario, quiero realizar lo más pronto posible.
Things I've done
2. Swim with sharks, whales, dolphins & tropical fish.
6. Throw a house party when your parents are out.
17. Own a pointless collection.
28. Sky dive.
29. Meet your idol.
33. Get to score a hole-in-one.
44. Attend a film premiere.
46. Scuba dive.
51. Learn another language.
75. Get a tattoo and/or a piercing.
80. Spend Christmas on the beach.
86. Run a marathon.
Things I won't do (and why I won't do them)
7. Be part of a threesome. Y dejar que alguien más lo bese y le haga cositas frente a mí? Ja! Qué risa!
19. Master Poker and win big in a casino. Los casinos se me hacen una gran mentira y algo totalmente innecesario. Apostemos jugando Adigma o algo más entretenido.
24. See a space shuttle launch. Sí, muy interesante, pero creo que invertiría mejor esas horas estando con Santiago.
30. Stay in the best suite in a five star hotel. Tan divertidos que son los hostales!
53. Complete a coast to coast road trip across America. Antes México, Sudamérica, Europa, Australia, Asia, África, Canadá...
95. Get revenge. Opino justamente lo contrario, que perdonar debería de ocupar este número en la lista.
Things I really want to do
9. Learn that instrument.
10. Leave your mark in graffiti.
26. Bungee jump.
31. Experience weightlessness.
32. See the aurora borealis.
36. Visit every country/continent.
43. Throw a dart into a map and travel to where it lands.
58. Live in the place you love.
72. Have enough money to do all the things on this list.
96. Be an extra in a film.
101. Continue your gene pool.
25.12.08
Regalos
Según la Real Academia Española, un regalo es una dádiva que se hace voluntariamente o por costumbre. A mí eso no me dice nada. Para mí un regalo es el resultado de un largo proceso de observación y conocimiento de alguien más. Son horas invertidas, materializadas en algo que al final (esperamos) arrancará una sonrisa. Por eso me encanta dar y recibir regalos. Y por eso también, jamás regalaré una caja de Ferrero Rocher ni unos boxers, porque los considero los artículos más impersonales de todo el mercado. Para mí es como si vinieran con una tarjeta en la que, con tinta invisible, se escribe "En estos días en los que el tiempo escasea, no quise detenerme a pensar qué sería realmente de tu agrado y preferí obsequiarte esto que nunca falla. Felicidades!"
Para mí, se trata de dejar una parte de ti en cada regalo. Regalo que puede ir desde un libro, un disco o un dulce hasta ese juguete que sanará tu infancia...no porque sea el correcto sino porque el proceso para conseguirlo te conmueve hasta lo más profundo de tu ser. Y por eso (y por la ensalada de manzana) amo la Navidad. Porque por una noche ellos se convierten en tetera, en páginas, en imágenes...y así, tú podrás llevarlos por siempre a tu lado.
Para mí, se trata de dejar una parte de ti en cada regalo. Regalo que puede ir desde un libro, un disco o un dulce hasta ese juguete que sanará tu infancia...no porque sea el correcto sino porque el proceso para conseguirlo te conmueve hasta lo más profundo de tu ser. Y por eso (y por la ensalada de manzana) amo la Navidad. Porque por una noche ellos se convierten en tetera, en páginas, en imágenes...y así, tú podrás llevarlos por siempre a tu lado.
24.12.08
En estos días
No sé cuándo empezó a ser una costumbre, pero por muchos años mi 24 de diciembre consistía en escribir en un papel los nombres de las personas que más quería en ese entonces y en irlos tachando conforme hacía una llamada para felicitarlos y desearles lo mejor.
Si no localizaba a alguien, volvía a llamar al días siguiente; así hasta que no quedara nadie en mi lista. Por supuesto no era trabajo fácil, porque por aquello de la sensibilidad de la época la lista acababa siendo más larga de lo que en realidad debía ser y entonces pasaba horas en el teléfono, mientras todos en la casa me ponían caras de desaprobación por no estar ayudando en la cocina. Aún así, yo me sentía feliz de compartir mi alegría y cariño con la gente que había estado conmigo en el transcurso del año. Pero después, vino el celular y entonces las llamadas fueron reemplazadas por mensajes personalizados que resumían mis buenos deseos para esas fechas. Y después...después cambié. Entendí que la gente que quiero sabe que la quiero por lo que digo y hago todo el año, no por lo que suceda en los últimos ocho días de diciembre. Y entonces ahora me limito a mandarle energía al Universo para que Él se encargue de repartirla entre todos, proceso que me ha funcionado muy bien. Pero este año quise hacer una excepción, porque a pesar de que incluso a nivel nacional he visto resultados, no sé qué tan bien llegue la transmisión a otros continentes y entonces preferí hablarles a mis franceses, Elise y Tibo. Fue en esas llamadas que, además de descubrir que los franceses hablan 13:20 minutos, redescubrí lo lindas que son las llamadas de larga distancia.
Me parece maravilloso querer contarlo todo y al mismo tiempo sólo querer escuchar, y entonces terminar haciendo preguntas al mismo tiempo que la otra persona, quedarse callados por no saber quién debe responder primero y romper el silencio con una risa que demuestra que todo está bien, que la amistad y el cariño todavía existen y que tú eres afortunada por extrañarlos; porque aunque duele, eso resulta mejor que nunca haber contado con su presencia en tu camino.
Si no localizaba a alguien, volvía a llamar al días siguiente; así hasta que no quedara nadie en mi lista. Por supuesto no era trabajo fácil, porque por aquello de la sensibilidad de la época la lista acababa siendo más larga de lo que en realidad debía ser y entonces pasaba horas en el teléfono, mientras todos en la casa me ponían caras de desaprobación por no estar ayudando en la cocina. Aún así, yo me sentía feliz de compartir mi alegría y cariño con la gente que había estado conmigo en el transcurso del año. Pero después, vino el celular y entonces las llamadas fueron reemplazadas por mensajes personalizados que resumían mis buenos deseos para esas fechas. Y después...después cambié. Entendí que la gente que quiero sabe que la quiero por lo que digo y hago todo el año, no por lo que suceda en los últimos ocho días de diciembre. Y entonces ahora me limito a mandarle energía al Universo para que Él se encargue de repartirla entre todos, proceso que me ha funcionado muy bien. Pero este año quise hacer una excepción, porque a pesar de que incluso a nivel nacional he visto resultados, no sé qué tan bien llegue la transmisión a otros continentes y entonces preferí hablarles a mis franceses, Elise y Tibo. Fue en esas llamadas que, además de descubrir que los franceses hablan 13:20 minutos, redescubrí lo lindas que son las llamadas de larga distancia.
Me parece maravilloso querer contarlo todo y al mismo tiempo sólo querer escuchar, y entonces terminar haciendo preguntas al mismo tiempo que la otra persona, quedarse callados por no saber quién debe responder primero y romper el silencio con una risa que demuestra que todo está bien, que la amistad y el cariño todavía existen y que tú eres afortunada por extrañarlos; porque aunque duele, eso resulta mejor que nunca haber contado con su presencia en tu camino.
17.12.08
Con su presencia
Hoy ni por equivocación debía quedarme en mi casa.
La razón: hace un año descubrí mi lugar favorito en el planeta.
Lake McKenzie en Fraser Island. Si no hacía algo de provecho, todo el día estaría pensando en sus tonos de azul, en la textura de su arena, en la pureza de su agua...y seguramente acabaría muy pero muy triste de estar en una ciudad semi-desecha por el circuito bicentenario.
Así que desde temprano me salí a la calle; quería caminar, pero caminar con un propósito lo suficientemente distractor como para que no saliera contraproducente y el tráfico y la contaminación fueran lo que acabara deprimiéndome. Y entonces lo resolví: debía buscar mis regalos de Navidad. Estacioné a Ricardo en alguna calle de la Condesa y entonces empecé a caminar. Caminé, caminé, caminé y caminé. Recorrí toda la zona, cosa realmente productiva porque antes, al entrar a la Condesa, mi cochecito mental empezaba a girar sobre su propio eje como carrito chocón que no quiere avanzar. Para mí todo era un gran pasadizo porque siempre salía a calles sin saber cómo lo había hecho. Pero no más! Ahora lo tengo todo muy claro. Y no sólo eso, sino que descubrí un par de tiendas con esas cosas curiosas que me gustan y lo más importante, descubrí los Tacos Hola. Unos tacos deliciosos-quiero-uno-ya-mismo que, además del guisado, se sirven con arroz o frijoles y guacamole o queso. Un queso...me podría comer un kilo completo de ese queso. Pero eso no es lo que te deja con el mejor sabor de boca. Lo es el hecho que, después de ser los más amables y serviciales contigo, al momento en que les quieres dejar propina, cordialmente te la regresan diciendo "Con su presencia basta".
No había visto eso en mi vida. Sorprendida, salí del local y enseguida supe que la única manera de retribuirles su esfuerzo sería escribiendo acerca de ellos. Lo mismo con el chavo que vende frijoles saltarines sobre Felix Cuevas, casi esquina con Insurgentes. Me encanta la idea de que todavía haya personas que le apuesten a vender frijoles saltarines en el moderno siglo XXI. Yo, por mi parte, le apuesto a escribir sobre esas cosas que para muchos parecen no tener mayor trascendencia, cuando en realidad son lo que me demuestra que la humanidad no está del todo perdida.
La razón: hace un año descubrí mi lugar favorito en el planeta.
Lake McKenzie en Fraser Island. Si no hacía algo de provecho, todo el día estaría pensando en sus tonos de azul, en la textura de su arena, en la pureza de su agua...y seguramente acabaría muy pero muy triste de estar en una ciudad semi-desecha por el circuito bicentenario.
Así que desde temprano me salí a la calle; quería caminar, pero caminar con un propósito lo suficientemente distractor como para que no saliera contraproducente y el tráfico y la contaminación fueran lo que acabara deprimiéndome. Y entonces lo resolví: debía buscar mis regalos de Navidad. Estacioné a Ricardo en alguna calle de la Condesa y entonces empecé a caminar. Caminé, caminé, caminé y caminé. Recorrí toda la zona, cosa realmente productiva porque antes, al entrar a la Condesa, mi cochecito mental empezaba a girar sobre su propio eje como carrito chocón que no quiere avanzar. Para mí todo era un gran pasadizo porque siempre salía a calles sin saber cómo lo había hecho. Pero no más! Ahora lo tengo todo muy claro. Y no sólo eso, sino que descubrí un par de tiendas con esas cosas curiosas que me gustan y lo más importante, descubrí los Tacos Hola. Unos tacos deliciosos-quiero-uno-ya-mismo que, además del guisado, se sirven con arroz o frijoles y guacamole o queso. Un queso...me podría comer un kilo completo de ese queso. Pero eso no es lo que te deja con el mejor sabor de boca. Lo es el hecho que, después de ser los más amables y serviciales contigo, al momento en que les quieres dejar propina, cordialmente te la regresan diciendo "Con su presencia basta".
No había visto eso en mi vida. Sorprendida, salí del local y enseguida supe que la única manera de retribuirles su esfuerzo sería escribiendo acerca de ellos. Lo mismo con el chavo que vende frijoles saltarines sobre Felix Cuevas, casi esquina con Insurgentes. Me encanta la idea de que todavía haya personas que le apuesten a vender frijoles saltarines en el moderno siglo XXI. Yo, por mi parte, le apuesto a escribir sobre esas cosas que para muchos parecen no tener mayor trascendencia, cuando en realidad son lo que me demuestra que la humanidad no está del todo perdida.
McKenzie
Let yourself be open and life will be easier.A spoon of salt in a glass of water makes the water undrinkable.
A spoon of salt in a lake is almost unnoticed.
~ Siddhartha Gautama
13.12.08
Almost unnoticed
Salvando lo que hubiera sido un año sin invitado especial...
El mundo es plano.
Todavía piensas que el mundo es redondo? Déjame decirte:
Es necesario que te actualices. El mundo es plano.
Soy el invitado especial de Sally Carmona para su blog y quien desea contribuir al mismo. Mi nombre es Marvin.
Espero poder convencerte de mi teoría.
Quisiera comenzar mencionando que el tema de esta entrada corresponde al título del libro de Friedman: The world is flat. Sin el afán de aburrirte, quisiera resumir en breves palabras lo que la frase representa. Cristobal Colón murió engañado pensando que había descubierto la India. Su error fue el pensar que la Tierra era redonda, pero sus estimaciones sobre el diámetro de la Tierra estaban erróneas. Su inspiración sobre cómo encontrar una ruta hacia la India por la puerta trasera para burlar el imperio árabe y crear una ruta de comercio hacia India se encontraron con una masa de tierra llamada América. Nada nuevo hasta el momento, verdad?
Qué tal que ahora también nosotros buscamos rutas de comercio hacia el mismo lugar. El software que estás utilizando para leer esta entrada muy probablemente fue fabricado en la India al igual que los cables, los diseños de las televisiones y pantallas, los call centers que nos atienden y muchas otras minucias. Ese mismo concepto, ese por el que tanta gente protesta, llamado globalización, es el que nos ha creado un mundo más fácil de entender. Así es, ahora ya no necesito entender cómo poder comunicarme con mis amigos en el exterior. Simplente la capacidad de una línea de cable, que quién sabe cómo se diseñó, me permite conectarme, entender cómo funcionan las cosas. Voy al super y me encuentro con productos de verano, aunque sea invierno, voy a comer pizza que es un concepto de Italia, estoy viendo un vehículo fabricado en Japón y de diseño irlandés, con ingenieros de Sudáfrica que toman cerveza de México y se comunican con China casi a diario para proceder a fabricarlo. Ah, claro, no importa dónde estés, de igual manera te vas a poder enterar de lo que sucede, leyendo en tiempo real las cosas que pasan en el mundo, talvez en CNN o quizá en el periódico El País de España, el New York Times, o el Straits Times de Singapur para saber cómo empataron el Real Madrid contra el Barcelona del cual todo el mundo estaba pendiente. Suena que todos podemos tener las mismas posibilidades, a la misma hora y aunque la cultura o manera de expresar las cosas varíe de un lugar a otro, el objetivo es el mismo: Tener al alcance el mismo mundo, el mundo del conocimiento.
Siempre que me encuentro con alguna persona de otro país le pregunto: "Qué haces con tu tiempo libre?" y la respuesta es la misma: Me reúno con mis amigos, novio/novia, familia, vamos al cine, salimos a comer, vamos de compras para la semana o a disfrutar de algún evento que haya en la ciudad, trato de relajarme, de leer un buen libro, de hacer todas las cosas que no me queda tiempo cuando estoy trabajando, etc. etc. Te suena familiar? Y es que en el siglo en el que nos tocó vivir, todos queremos encontrar ese factor común que nos une.
Casi garantizado que si estas leyendo esto, tienes una cuenta de "social networking", llámese como se llame, facebook, hi5, myspace, linked in o cualquier otra. Por qué? Porque estamos interesados en saber, en conocer, enterarnos de lo que sucede a nuestro alrededor. Somos curiosos por naturaleza y no ha sido sino en los últimos años que por el hecho de tener mejores maneras de comunicarnos nos hemos dado cuenta que somos mas similares de lo que parecemos con gente a nuestro alrededor, de nuestra familia, amigos y gente que nos rodea ya sea en tu país o fuera de él.
El mundo ya no es tan redondo, donde las diferencias de hora cuentan, donde unos saben algo y otros no. Ahora el mundo del conocimiento se ha expandido y por ello todos vivimos, por así decirlo, en la misma dimensión, en un lugar más plano.
El tip inútil del dia: Sabías que los cocodrilos tragan piedras para poder nadar más profundo?
Y además que las hormigas no duermen?
Es tiempo que comiences a hacer tu mundo más plano. Ambos no son razonamientos inventados. Científicamente probado.
Si no me crees, lee Wikipedia.
Felices fiestas, ya sea navidad, hannukah, año nuevo, día de reyes, año nuevo chino o árabe.
12.12.08
Suena
Toda la tarde estuve jugando con Santiago en la casa. Hacerlo siempre me pone en un mood muy relajado, en el que las cosas parecen nuevas porque con él redescubro sonidos, colores, movimientos...y emociones. Tal vez si hubiera estado haciendo otra cosa no me hubiera sentido tan vulnerable, pero cuando uno está compartiendo ese mundo de risas y abrazos, lo último que esperas es una llamada de tu papá pidiendo que localices a tus hermanas porque acaban de hablarle diciendo que está secuestrada.
Mar estaba conmigo, así que inmediatamente tomé el teléfono y le marqué a Luisa. Por supuesto sabía que estaría bien, que la llamada había sido una de esas que hacen al azar y que los verdaderos secuestros le pasan a otra gente, no a nosotros.
Pero hubo dos segundos, dos largos segundos, en los que mi llamada tardó en conectar y entonces, muy en el fondo, pensé que en realidad esas cosas pasan, que si pueden secuestrar al experto en secuestros, ya nadie está exento porque, bien planeado, resulta la manera más fácil de conseguir dinero.
Entonces mi corazón se detuvo; lo único que sonaba ya era el teléfono. Y de repente, su voz. Estaba bien. Le dije que la veía en un rato más y entonces llamé a Gaby. También ella estaba bien. Colgué y lo único que pude hacer fue abrazar a Santiago.
Mar estaba conmigo, así que inmediatamente tomé el teléfono y le marqué a Luisa. Por supuesto sabía que estaría bien, que la llamada había sido una de esas que hacen al azar y que los verdaderos secuestros le pasan a otra gente, no a nosotros.
Pero hubo dos segundos, dos largos segundos, en los que mi llamada tardó en conectar y entonces, muy en el fondo, pensé que en realidad esas cosas pasan, que si pueden secuestrar al experto en secuestros, ya nadie está exento porque, bien planeado, resulta la manera más fácil de conseguir dinero.
Entonces mi corazón se detuvo; lo único que sonaba ya era el teléfono. Y de repente, su voz. Estaba bien. Le dije que la veía en un rato más y entonces llamé a Gaby. También ella estaba bien. Colgué y lo único que pude hacer fue abrazar a Santiago.
8.12.08
Lo último que esperas
Cuando estás en el séptimo semestre de tu carrera, vaciando en tu computadora los datos de ese último examen de Finanzas que tendrás, lo último que esperas es que el profesor te exente.
Lo último que esperas es que llegue hasta donde estás sentada, te cierre la computadora y te diga "Ya vete".
Pero así es Jorge Arturo León y Vélez Avelar a.k.a. Trukini.
Arturo será el único profesor que te suba la calificación en función de los pacacaos que tengas, sin importar si te los ganaste o si se los compraste al "compadre" de junto. Arturo será el único profesor que te suba un punto en el examen final si le entregas una foto en la que salgas con Santa Claus. Arturo será el único en ponerse corbatas musicales, el único con un acento tan peculiar, el único profesor que no te aburrió en una sola clase durante todo un año. El único que, estoy segura, será un niño por el resto de su vida.
Fue un honor Arturo, gracias por todo.
Lo último que esperas es que llegue hasta donde estás sentada, te cierre la computadora y te diga "Ya vete".
Pero así es Jorge Arturo León y Vélez Avelar a.k.a. Trukini.
Arturo será el único profesor que te suba la calificación en función de los pacacaos que tengas, sin importar si te los ganaste o si se los compraste al "compadre" de junto. Arturo será el único profesor que te suba un punto en el examen final si le entregas una foto en la que salgas con Santa Claus. Arturo será el único en ponerse corbatas musicales, el único con un acento tan peculiar, el único profesor que no te aburrió en una sola clase durante todo un año. El único que, estoy segura, será un niño por el resto de su vida.
Fue un honor Arturo, gracias por todo.
6.12.08
1.12.08
Empezando
Hoy tuve una "cita de trabajo". Y la pongo entre comillas porque yo iba con la idea de platicar con el director de la Fundación Desarrollo Sustentable para encontrar una manera de colaborar con la causa y resultó que me ofrecieron algo así como la Dirección de Procuración de Fondos. Pero la propuesta fue de una manera tan casual, sin nada de formalismos, que en cuanto pienso en ella mis cejas se arquean a manera de pregunta. Realmente es? Ya formo parte de la fundación? De ser así, haber ido al coloquio resultó más rentable que una promoción 2x1: no sólo me llevé el conocimiento y los contactos, sino la oportunidad de trabajar en lo que realmente me apasiona.
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