Presumir se ha vuelto una práctica poco aceptada en la sociedad, pero qué pasa cuando uno en el mejor de los planes quiere darle a conocer a los demás su fortuna? También se le llama presumir? Pues yo no sé pero si sí, no me importa ser una presumida porque las circunstancias lo ameritan. Hace ya un par de fines de semana paseando por la ciudad compré una revista llamada Time Out que es tal cual la Tiempo Libre de muchas ciudades, no sólo de Sydney. Dentro de las muchas cosas que incluía estaban varios sorteos, y una de esas noches en las que no tenía nada que hacer, decidí probar mi suerte e inscribirme en todos. Había viajes a Londres, invitaciones V.I.P. a la entrega de unos premios australianos y pases gratis para la premier de la nueva película de David Cronenberg. Y adivinen qué me gané? Pues por supuesto los pases para Eastern Promises! La verdad creo que todo se debe a que la vida se compadeció de mi última experiencia cinematográfica y por eso decidió mandarme este premio para compensarme un poco. Yo diría mucho...
La película es muy recomendable. Trata de la mafia rusa y con un actor como Viggo Mortensen (Aragorn) tan extremadamente bueno en los dos sentidos de la palabra (es que qué cuerpo señores!), el tema se desarrolla de una manera muy especial, muy digerible. Pero lo más maravilloso no fue sólo que me regalaron palomitas y refresco para ver la premier, sino que después estuvimos invitadas (fui con Aurelie, mi amiga la francesa) a una fiesta V.I.P. en un bar del Hilton, con todo y martini gratis! No sé ustedes pero yo a eso sí le llamo premio! En resumidas cuentas la pasé muy bien. Aquí la foto que lo comprueba.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario